¿Cuántos días hacen falta para visitar Nantes y disfrutarla a tope?
- Medio día: Te llevas un «teaser» de Nantes, pero te quedarán ganas de más.
- Un día: Perfecto para ver lo imprescindible.
- Dos días: Disfrutar la ciudad sin prisas.
- Tres días o más: Conocer su lado más auténtico y aventurarte en los alrededores.
Esta es la pregunta del millón para todos los que, como yo, están soñando con un viajecito a esta pintoresca ciudad del noroeste de Francia.
Así que si quieres saber cuántos días de tu apretada agenda (y de tu cartera) deberías dedicarle, sigue leyendo porque te lo voy a contar todo.
¿Vale la pena visitar Nantes?
Para ponernos en contexto, Nantes es la capital histórica de Bretaña y hoy en día se considera una de las urbes más dinámicas de Francia.
Aunque no es tan grande como París, es un lugar que sabe cómo mezclar su pasado medieval e industrial con una modernidad vibrante y un toque artístico que te cautivará desde el minuto uno.
¡Eso sí, ve entrenando piernas! Vas a caminar bastante, porque te vas a encontrar desde castillos y museos, hasta adorables rincones ribereños, mercados y, por supuesto, las famosas “Máquinas de la Isla” (un proyecto artístico con criaturas mecánicas gigantes que te volarán la cabeza).
Ir por la calle y toparte con un elefante mecánico de 12 metros de altura paseando no se ve todos los días.
¿Medio día en Nantes? Un adelanto fugaz
Si, por alguna razón descabellada (o porque tu tren sale en unas horas) solo tienes medio día en Nantes, no te preocupes, siempre hay un plan exprés:
- Château des Ducs de Bretagne: El famoso castillo de los Duques de Bretaña es el icono de la ciudad. Basta con echarle un vistazo rápido por fuera y, si te da tiempo, darte una vuelta por sus murallas para obtener vistas panorámicas.
- La Catedral de San Pedro y San Pablo: A poca distancia del castillo, te topas con esta imponente catedral gótica.
- Le Lieu Unique: Si vas con prisa y no tienes tiempo de visitar mil lugares, pásate por aquí para ver la antigua fábrica de galletas LU convertida en un espacio cultural moderno. Apunta para un cafecito rápido o para una foto original.
Con estas tres paradas, puedes fardar en Instagram y decir “He estado en Nantes”… aunque quizá solo fue un suspiro.
Un día en Nantes: ¡a tope de energía!
¿Tienes un día entero para explorar? Perfecto. Te recomiendo que madrugues (un poco) para sacarle el jugo a la ciudad.
- Desayuno junto a la Place Royale o Place Graslin
Empezar el día con un café y un croissant mientras la ciudad despierta, no tiene precio. Nantes se disfruta mejor con la barriga llena. - Château des Ducs de Bretagne (por dentro esta vez)
Con un día, ya vale la pena entrar al castillo y al Museo de Historia Urbana (interactivo y ameno). Además, el patio interior y las murallas merecen una visita. - Barrio medieval de Bouffay
¡Mi parte favorita! Calles empedradas, casas con entramado de madera y restaurantes típicos. Ideal para comer o picar algo antes de la siguiente parada. - Máquinas de la Isla (Les Machines de l’Île)
¿Quieres ver un elefante mecánico gigante? Este es el lugar. Es una experiencia única, mezcla de parque temático y galería de arte al aire libre. ¡No te lo pierdas! - Atardecer en Île de Versailles
Un jardincito japonés en mitad del río Erdre. Perfecto para reposar tanta caminata. Si tienes energía, puedes incluso alquilar una canoa o barca eléctrica. - Cena y copas en el centro
Termina el día en uno de los bares con música en vivo o restaurantes modernos en el centro. La gastronomía en Nantes es deliciosa, desde ostras hasta crepes saladas (las típicas galettes bretonas).
Dos días en Nantes: con tiempo para saborear
Si dispones de dos días, ¡enhorabuena! Te da margen para ver la ciudad sin correr la maratón. Además del plan del día anterior, añade:
- Día 2
Por la mañana:- Musée d’Arts de Nantes: Uno de los museos de arte más antiguos de Francia, reabierto hace poco con una renovación alucinante.
- Passage Pommeraye: Una elegante galería comercial del siglo XIX que te transporta al pasado. Y de paso, quizás caiga algún souvenir.
- El Jardín de las Plantas (Jardin des Plantes): Un parque botánico gratuito lleno de esculturas vegetales y un ambiente muy relajado.
- Barrio de Trentemoult: Un antiguo pueblecito de pescadores al otro lado del Loira. Casas de colores, restaurantes coquetos y un ambiente bohemio ideal para fotos. Se llega fácilmente en ferry desde el centro.
- Cena típica: Prueba las galettes bretonas (crepes saladas) con sidra, y si te queda hueco, un buen postre francés.
- Vida nocturna: Nantes tiene pubs y locales de música que abren hasta tarde. Si quieres probar algo distinto, busca bares con música jazz en vivo.
Tres días o más en Nantes: la experiencia completa
Si eres de los míos y te gusta exprimir cada rincón, quédate al menos tres días.
Tendrás tiempo de explorar lugares menos turísticos y hacer excursiones cerca de Nantes:
- Museo Jules Verne: Nantes es la ciudad natal del famoso escritor de ciencia ficción. Su museo es una joya con primeras ediciones y montones de curiosidades.
- Excursión a Clisson: Un pueblecito con aires italianos a solo media hora en tren, ideal para una escapada de medio día. Su castillo en ruinas y el paisaje vitivinícola te van a encantar.
- Museo de la imprenta: Si eres fan de la historia y la artesanía, este pequeño museo te mostrará máquinas antiguas y técnicas tradicionales.
- Paseo en bici por el Loira: En los alrededores de Nantes, la ribera del Loira es ideal para cicloturismo. Te toparás con pequeños castillos y viñedos.
- Explorar bares y restaurantes alternativos: Nantes tiene una fuerte comunidad artística y local. ¡Ve por el centro y encuentra tu nuevo rincón favorito para echar el rato!
Recomendaciones finales
- Reserva con antelación: Sobre todo si vas en temporada alta. Las Máquinas de la Isla y algunos museos se llenan rápido.
- Tarjetas turísticas: Existe el “Nantes Pass” que ofrece entrada a varios sitios y transporte público ilimitado. Échale un ojo porque puedes ahorrar unos euros.
- Transporte: Nantes es muy caminable, pero también cuenta con una excelente red de tranvías y autobuses.
- Gastronomía local: Aprovecha para probar las famosas galletas LU, creadas originalmente en esta ciudad. ¡Son un icono delicioso!
Conclusión
- Precios Entradas Monumentos NANTES + Horarios
- Dónde alojarse en Nantes: Zonas y Hoteles Recomendados
- Qué ver cerca de Nantes, 10 ciudades y pueblos
- Qué ver entre Nantes y Rennes: Ruta e Itinerario
En definitiva, si solo dispones de poco tiempo, mejor que nada, porque Nantes vale cada minuto que le dediques.
Y si puedes quedarte más, no te arrepentirás. Créeme: aquí tienes arte, historia, gastronomía, vistas increíbles y hasta un elefante mecánico. Así que la próxima vez que planifiques tu escapada, recuerda que Nantes se saborea mejor sin prisas. ¡Buen viaje!
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